·El periodo de adaptación·

La entrada de los niños/as requiere una colaboración muy estrecha entre las familias y el personal educativo del centro para que se adapten con éxito al nuevo ambiente y logremos entre todos/as se encuentren contentos y alegres durante su estancia.

El proceso de adaptación se planifica pedagógicamente, debido a la gran importancia que tiene para los niños y niñas en la vida escolar y su vida misma. Familia y escuela son responsables de que ese periodo se desarrolle en unas condiciones beneficiosas para ellos.

La escolarización supone entrar en una situación desconocida, experimentan un sentimiento de abandono que le produce inseguridad. Entran en un espacio nuevo donde se sienten desorientados y perdidos. Y además sufren una desestructuración temporal, donde pierden la noción de la rutina cotidiana a la que estaban acostumbrados.

También tenemos que pensar en lo que sufren las familias al dejar a su hijo o hija en un medio desconocido. Esto le provoca ansiedad y desconfianza hacia el centro y de forma consciente o inconsciente estos sentimientos repercuten en los pequeños y pueden alargar o entorpecer el proceso de adaptación.

Organizamos lo mejor posible todo para que sus primeras experiencias en el centro sean gratificantes, para que  se sientan felices y queridos/as, y perciban que hay un grupo iguales que son sus amigos/as.

Planificación del periodo adaptación

Objetivos:

– Crear un clima de seguridad afectiva, tanto para los niños/as como para las familias.
– Proporcionar una atención individual y personalizada.
– Familiarizarlos con el personal del centro y el espacio.
– Establecer sencillas normas de convivencia y el compromiso a respetarlas.
– Favorecer el contacto con las familias para que este periodo se desarrolle de manera satisfactoria, y sea lo más breve posible.
– Acostumbrarlos a los horarios y ritmos del centro.
– Ofrecerle una variada y atractiva gama de material y actividades.
– Desarrollar el hábito alimenticio.
– Cubrir todas las necesidades de los niños/as: higiénicas, alimenticias, etc.

Las familias:

Realizamos una reunión con todas las familias, explicando las normas del centro, horarios, calendarios, objetivos, etc. y respondiendo a cuestiones o dudas que ellos tengan. En esta reunión se les abre la puerta del centro para que conozcan las dependencias y al personal que les atenderá.

Entregaremos el calendario y el horario del periodo de adaptación, además de un documento donde aparecen las pautas y los criterios a seguir por las familias para que ayuden a sus hijos e hijas en este espacio de tiempo.

El primer día de clases los padres y/o madres se quedan en el centro con sus hijos/as compartiendo con ellos los materiales y el espacio donde permanecerá todo el curso escolar con su tutora.

En el mes de Junio habrá un primer contacto con la escuela, donde se les entregará la documentación que deben cumplimentar para que podamos conocer mejor a vuestros hijos e hijas.

La entrevista o cuestionario inicial:

La entrevista inicial supone un primer contacto con la familia y en ella se recoge la información necesaria en torno a nacimiento, alimentación, control de esfínteres, desarrollo evolutivo, enfermedades, alergias, sueño, situación familiar, etc.

Los niños y las niñas:

Durante los primeros días es conveniente reducir el tiempo de permanencia en la escuela, aumentándolo progresivamente.

Se crea un ambiente festivo y de acogida, se realizan juegos libres, grupales y de psicomotricidad, se cantan canciones, se escucha música, se baila, se cuentan cuentos y se hacen dramatizaciones, se les enseña el material, ven libros, realizan dibujos libres con diferentes materiales, etc.

Se le proporciona una atención individualizada y personalizada. El tiempo transcurre tranquilizando a los pequeños/as para que no se sientan tan agobiados/as.

Se les acostumbra a un horario y una rutina nueva.

Los juegos de estos primeros días son para conocer los nombres de los amigos/as y del personal; y al mismo tiempo conocer el espacio y el material.

Creamos, junto a ellos, espacios individuales de organización dentro del aula: perchas, carpetas, casilleros, etc.

Los momentos del cambio de pañales, aseo e ir al servicio son muy importantes y se aprovechan para potenciar los vínculos afectivos. Ellos/as se sienten especialmente queridos y mimados como si fuera el único.

Siempre hay que escucharles y prestarles atención cuando se dirijan a nosotros, tratando de solucionar los problemas, alabarles y animarles cada vez que realicen una actividad.

El material y los juguetes:

En cuanto a la organización espacial de los recursos es importante que todos los juguetes y materiales estén dispuestos de manera atractiva, animándoles a la acción y manipulación de los mismos.

Las actividades:

En este periodo se realizarán actividades para:

– Conocer el grupo de iguales.
– Conocer progresivamente a las personas que forman parte de la dinámica del aula.
– Conocer los intereses y necesidades de los niños/as e ir estableciendo relaciones de calidad.
– Conocer el material del aula y su ubicación en las diferentes zonas de trabajo, así como su función y mantenimiento.
– Colaborar en el aseo.
– Ayudar al grupo a prever y recordar las rutinas, dándoles puntos de referencia claros y estables.
– Participar y colaborar.
– De desinhibición y de relajación.
– Conocer las distintas dependencias del centro.

Horario:

Después de muchos años experimentando este periodo y pensando siempre en los usuarios, es decir, los niños y niñas de la escuela infantil, se ha llegado a la conclusión de que el mejor horario es el que encontrareis expuesto en el tablón de anuncios.